jueves, 26 de abril de 2018

ADICTO AL TRABAJO ¿NO SABES PARAR?


    ADICTO AL TRABAJO   

¿NO SABES PARAR?



La persona con un problema de laborodependencia se caracteriza por mantener una implicación excesiva con su trabajo. Esta implicación es progresiva, poco a poco se va invirtiendo más tiempo y más esfuerzo, hasta llegar a un punto en que la persona padece consecuencias negativas. Dentro de estas las más habituales son: conflictos con su entorno (incompatibilidad con la vida familiar, problemas de pareja, aislamiento de los amigos…) y físicas (estrés, agotamiento…). La persona a pesar de estos problemas se siente incapaz de controlar y reducir el tiempo que dedican a su trabajo.

Esta dedicación excesiva al trabajo no ha de responder a exigencias del propio puesto de trabajo, sino a una necesidad personal, producto de una sobrevaloración o falsa atribución que la persona hace de su implicación en el trabajo.

Fuente:ais-info.org

ADICCIÓN A INTERNET ¿DESCONECTAS?

ADICCIÓN A INTERNET 

¿DESCONECTAS?


Esta conducta de abuso se va perpetuando y se hace necesario ir aumentando el tiempo de conexión para lograr la misma satisfacción que al principio. La persona se mantiene en esta conducta a pesar de las consecuencias negativas que terminan produciéndose (aislamiento, fracaso escolar, conflictos familiares…).


Las señales de alarma que pasamos a definir, han de tomarse en consideración para aquellos casos que se sospeche de un uso indebido y abusivo de internet:

- El tiempo que se permanece conectado va incrementando gradualmente.

- Alteración del ritmo de sueño: la persona va reduciendo su tiempo de sueño (duerme menos de 5h), permaneciendo despierto hasta altas horas de la madrugada. Esto puede llegar a producir fatiga, debilidad y en general un deterioro físico y de salud.

- El ámbito familiar, académico y profesional se van viendo perjudicados. La persona se va aislando de su entorno y descuida todas sus obligaciones sociales. La persona deja de comunicarse con familiares y amigos, lo que le lleva a un incremento de su soledad y depresión. Se dejan de hacer las actividades de responsabilidad pero también las de ocio.

- Alteraciones del estado de ánimo que van desde estados depresivos al mal humor, ansiedad o impaciencia.

- Cuando no se puede conectar (voluntaria o involuntariamente) la persona puede mostrarse muy irritable o depresiva, cuando la conexión se enlentece puede expresar una gran impaciencia.

- Ante firmes propósitos de reducción del tiempo de conexión o de no conectarse la persona no logra mantenerse. La persona se propone estar conectado unos minutos y finalmente es incapaz de dejarlo durante horas.

- Síndrome de abstinencia cuando no se conecta, caracterizado por una sintomatología propia: agitación psicomotora, ansiedad, pensamientos obsesivos sobre Internet, fabulación y ensoñaciones con Internet, movimientos voluntarios o involuntarios similares a los que se efectúan sobre un teclado o ratón del ordenador, irritabilidad, desesperanza…

- La persona finalmente se conecta a Internet porque toda esta sintomatología mejora, así conectarse a Internet se convierte en un aliviador de malestar que produce el síndrome de abstinencia.

- El pensamiento de la persona circula siempre entorno a lo que pasa en Internet de modo obsesivo, esto tanto si está como si no está conectado.

- La persona permanecerá conectada y negará tener un problema a pesar de las evidentes repercusiones negativas tanto a nivel físico como social, laboral o psicológico. Algo que suele caracterizar a estas personas es la falta total de conciencia de problema, aunque a veces pueda admitir cierto grado de “enganche” no son conscientes de su problema, repercusiones y medidas necesarias para resolverlo.


- Por último, es importante tener en cuenta la opinión del entorno, si éste valora si hay un problema de uso abusivo. Es habitual que la relación con el entorno familiar sea de tensión debido precisamente a esta discrepancia de opinión sobre el uso que se hace de Internet, la persona suele ver a su entorno como exagerado y alarmista e incluso puede llegar a sentirse incomprendido.

Fuente:ais-info.org


miércoles, 25 de abril de 2018

ADICCIÓN A LAS REDES SOCIALES


 ADICCIÓN A LAS REDES SOCIALES



Una persona experimenta una adicción hacia el uso de las redes/comunidades sociales cuando la inversión de tiempo en esta conducta llega a ser descontrolada y además, cuando se obtienen consecuencias negativas que no son óbice para el cese de este comportamiento.

SEÑALES DE ALARMA



- Las horas que la persona va invirtiendo en la Red o Comunidad cada vez son más. Esto es como consecuencia de una tolerancia progresiva que es común en las adicciones.
Mentir/ocultar el tiempo que se dedica realmente a estar conectado.

- Necesidad de llegar a casa y conectarse inmediatamente.

- Ante la abstinencia obligada o autoimpuesta se experimentan algunas consecuencias negativas: agitación psicomotora, ansiedad/depresión, pensamientos obsesivos respecto a la Red o comunidad, fantasías o pensamientos relacionados con el uso que se hace de Internet, movimiento de “tecleteo” voluntario o involuntario de los dedos e irritabilidad o agresividad.

- Reducción las actividades de ocio que se hacían hasta ese momento.

- Disminución de la comunicación con los miembros de la familia en el hogar y menor participación en las tareas y actividades familiares.

- Se continúa usando Internet a pesar de ser evidentes las consecuencias negativas que se experimentan en las diferentes áreas de la vida, laboral, académica, familiar… (Suspensos, avisos en el trabajo, quejas de la pareja, molestias físicas, privación de sueño…)

- Una señal de alarma muy importante es que el entorno próximo diga a la persona que se cree que tiene un problema con su conducta de uso de las redes y/ o comunidades sociales.

- Si el patrón de conducta se da a lo largo de un periodo de tiempo considerable, mínimo 6 meses, de modo continuo, se experimenta un deterioro directamente relacionado con la conducta abusiva y varios de los factores mencionados se cumplen, entonces se debe acudir a un especialista que nos dará un correcto diagnóstico y orientación a la hora de intervenir para mejorar la situación.

Fuente: ais-info.org



lunes, 28 de agosto de 2017

ADICCIÓN A VIDEOJUEGOS

Inconvenientes de los Videojuegos

Muchas de las ventajas que posen los videojuegos favorecen que se dedique mucho a tiempo a jugar con ellos. El uso excesivo puede convertirse en abuso y cuando aparecen inconvenientes tales como la perturbación con otras actividades, la necesidad de utilizarlo durante más tiempo para conseguir los mismos objetivos, o el malestar cuando se lleva tiempo sin jugar o se priva del mismo, es cuando podemos hablar en realidad de una adicción a videojuegos.

Adicción al Juego Online



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La persona con este problema se caracteriza por jugar online durante un tiempo excesivo, más de 3 horas diarias y esta conducta se mantiene aunque se vaya convirtiendo en una obsesión que va reportando graves consecuencias negativas (fracaso escolar, conflictos familiares…).
Es un problema más habitual en adolescentes y jóvenes pero no es exclusivo de esta franja de edad. Estas personas empiezan a jugar como una vía de escape y entretenimiento pero terminan necesitando jugar para no sentir malestar, nervios… con el tiempo se muestran incapaces de reducir el tiempo de juego o de mantenerse sin jugar.
Fuente: www.ais-info.org

lunes, 24 de julio de 2017

PREVENCIÓN DE LA ADICCIÓN AL MOVIL

ADICCIÓN AL TELÉFONO MÓVIL




SEÑALES DE ALARMA


- El modo de comportarse de la persona con este tipo de dependencia consiste en permanecer constantemente alerta del móvil, vigilante a cualquier señal y cada muy poco tiempo. A pesar de no oírlo consulta la pantalla del móvil para ver si ha recibido mensajes o “toques”, lo hace de modo compulsivo e incontrolado aunque este realizando otra actividad como trabajar, estudiar, comer…

Suelen tener varios móviles con todo tipo de prestaciones.

Si a la persona se le rescinde el uso, voluntaria o involuntariamente, aparece sintomatología típica de un ”síndrome de abstinencia”: mal humor, excesivo nerviosismo, ansiedad aguda, irritabilidad, sudoración, palpitaciones… etc.
Esta sintomatología mejora en cuanto se puede volver a hacer uso del móvil.

- Suelen tener varios móviles con todo tipo de prestaciones. Están muy atentos a las novedades y en ocasiones algunas personas incluso llegan a contratar varias líneas de telefonía móvil con varias compañías.

- El uso del móvil es el eje de su vida en el adicto, usándose a todas horas y como vehículo principal de relación. 

- Carácter inmaduro, falta de autoestima y seguridad en sí mismo, inestabilidad, dificultades para iniciar o mantener relaciones sociales, deficiencias en sus habilidades sociales y muy especialmente en sus capacidades de comunicación.

- El gasto económico que se realiza es grande, llegando a invertir todo el dinero del que se dispone. En ocasiones la persona se ingeniará maneras legales e incluso no legales para conseguir más dinero para el móvil. 

- Sus contactos sociales reales van disminuyendo en favor de una comunicación casi exclusivamente mediada por el móvil, poco a poco va sufriendo un asilamiento que le comportará sentimientos de soledad y depresión.

- Su conducta compulsiva también le lleva al abandono de actividades lúdicas y de ocio que hacía hasta ese momento, como por ejemplo la práctica de algún deporte, salidas con conocidos… lo que a su vez aumenta el aislamiento.

- La persona con adicción al móvil frecuentemente tendrán situaciones de mala comunicación y relación con su entorno más inmediato (familia, pareja, amigos…) ante los que se siente continuamente expuesto y atacado y del que se defenderá incluso agresivamente.

- Con el tiempo la persona es incapaz de mantener un buen funcionamiento en otros aspectos de su vida, produciéndose fracaso escolar, ruptura de relaciones importantes, bajo rendimiento laboral...

- La persona tiende a minimizar e incluso negar estas consecuencias negativas al tener una total falta de conciencia del problema.



PREVENCIÓN DE LA ADICCIÓN AL MÓVIL


El uso del móvil es útil y necesario; también resulta divertido y entretenido, pero es necesario usarlo de forma apropiada porque, en caso contrario, favorece un uso disfuncional que en algunas personas puede provocar dependencia.






Sugerencias para prevenirla aparición de problemas de adicción:

- Utilizar alguna forma de contrato que permita limitar el consumo.

- Apagar el móvil por la noche.

- Desconectar el móvil,  o ponerlo en silencio, durante momentos en los que se estén realizando otras actividades cuya interrupción sea perjudicial o inconveniente.

- Dedicar un tiempo para revisar los mensajes o llamadas recibidas.

- Tener constancia de las llamadas realizadas, el tiempo dedicado  y del gasto ocasionado. Llevar un registro.

lunes, 17 de julio de 2017

JUEGO PATOLÓGICO: LA EVOLUCIÓN DEL TRASTORNO

JUEGO PATOLÓGICO: LA EVOLUCIÓN DEL TRASTORNO







La evolución hacia un juego patológico suele describirse a través de diferentes fases, la fase de pérdida:

  Quien juega mantiene una actitud excesivamente optimista que le conduce a aumentar significativamente la cantidad de dinero que arriesga en el juego. Una vez que la persona se ha hecho jugador habitual, el factor más importante que va a facilitar que se convierta en jugador patológico, según Lesieur (1984), es su accesibilidad al préstamo. Cuando el jugador pierde todo su dinero tiende a acudir a otras fuentes para conseguirlo. Cuando las deudas se han disparado y las posibilidades de obtener las cantidades de dinero que necesita se reducen, ve todas sus opciones disponibles para obtener dinero con que poder pagar estas deudas, limitadas a una: el juego. Se produce el fenómeno de “caza” descrito por Lesieur, consistente en que el jugador cada vez juega más para intentar resarcirse de sus deudas, cada vez pierde más y las pérdidas son mayores. Ahora ya no juega para ganar sino para recuperar lo perdido.


 Las deudas y pérdidas amenazan su autoestima y su situación financiera. Intenta reponer las deudas lo más rápidamente posible, para evitar que la familia, las amistades y otras personas lo lleguen a saber. Se convierte en un experto en buscar pretextos y excusas e inventar mentiras. 

 Los pequeños préstamos pedidos a familiares y personas de confianza al final de la primera etapa se convertirán, en esta segunda fase, en préstamos concedidos por banco, tarjetas de crédito y prestamistas como forma de inversión que serán devueltos con las futuras ganancias. Una vez que las fuentes de préstamo legal se agotan, el riesgo de realizarlos de forma ilegal emerge; pudiéndose cometer, algún tipo de robo, fraude, falsificación o estafas. Los delitos más comunes entre las mujeres jugadoras difieren de los cometidos por los varones. Destacan, la falsificación de talones, la realización de operaciones ilegales en el ámbito del juego y la irrupción en el mundo de la prostitución; siendo menos probable, en comparación con los varones, verse envueltas en estafas relacionadas con préstamos, evasión o fraude de impuestos, robos a pequeña y gran escala, venta de droga o de objetos robados. 

 La necesidad por recuperar el dinero perdido y poder devolver las deudas contraídas, hace que cada vez dedique más tiempo al juego, lo que provoca que destine cada vez menos tiempo e interés a la familia y al trabajo, unido al cúmulo de excusas y mentiras, hace que tanto en el marco familiar como en el laboral comenzarán a surgir problemas, siendo algunas de las consecuencias que siguen, y que van a agravar aun más el problema. La conducta de juego pierde el contexto social en que solía desarrollarse para convertirse en un juego solitario, la persona jugadora que en otro tiempo se presentaba como habilidoso es ahora un jugador menos ducho que, sin embargo, apuesta más. Su deseo más ferviente es tener un largo periodo de ganancias que le permita pagar las deudas y a su vez tener una reserva de dinero suficiente para seguir jugando sin necesidad de pedir prestado. Pero las ganancias, aunque ocurran periódicamente, son menores que las deudas, la presión de los acreedores aumenta y aquí es cuando quien juega se ve obligado a confesar a su familia, amigos, banco, etc., el problema, y decide e incluso promete que va a dejar de jugar. Esto dura poco tiempo, ya que vuelve a alimentar su optimismo irracional y la ilusión de ser impune y vuelve de nuevo a jugar.

Gabinete Psicológico G.SINadicciones

jueves, 13 de octubre de 2016

Actitud y Bienestar





- Aceptar el hecho de que vivir es sinónimo de tener problemas.

- Reconocer las situaciones problemáticas con rapidez.


- Controlar la tendencia a responder impulsivamente.


- El problema es una combinación de factores ambientales y personales.


- El problema se considera como un reto u oportunidad de crecimiento personal.


- Solucionar el problema exige tiempo y esfuerzo.


- Hay soluciones y se pueden encontrar. Actitud de afrontamiento.