lunes, 26 de agosto de 2013

EL ABUSO DE ALCOHOL Y LOS TRASTORNOS ALIMENTICIOS COMPARTEN VÍNCULO GENÉTICO

Investigadores de la Escuela de Medicina de la Universidad de Washington en San Luis, Estados Unidos, han descubierto que es probable que algunos de los mismos genes estén involucrados en ambos, tal y como publicará en su edición de septiembre 'Journal of Studies on Alcohol and Drugs'. Los científicos informan en el artículo de que las personas con dependencia del alcohol pueden ser genéticamente más susceptibles a ciertos tipos de trastornos de la alimentación, y viceversa.


   "En la práctica clínica, se ha observado que las personas con trastornos de la alimentación también tienen altas tasas de abuso y dependencia del alcohol", dijo Melissa A. Munn-Chernoff, autora principal de la investigación. "Otros estudios se han centrado en las conexiones genéticas entre la dependencia del alcohol y los trastornos de la alimentación, pero todos examinaron sólo a las mujeres. El nuestro fue el primero en incluir a los hombres también", resalta.
   Según Munn-Chernoff, investigador postdoctoral en Psiquiatría, es importante porque a pesar de que los trastornos alimentarios tienden a ser considerados como un problema femenino, afectan también a los hombres. En los datos recogidos de cerca de 6.000 gemelos adultos en Australia, Munn-Chernoff y sus colegas encontraron que los factores genéticos comunes subyacen el alcoholismo y ciertos síntomas de trastornos alimentarios, como los atracones de comida y hábitos de purga, que incluyen vómitos autoinducidos y el abuso de laxantes.
   En el estudio de los gemelos, los investigadores utilizaron métodos estadísticos para determinar las probabilidades de que ciertos rasgos resulten de los mismos genes. Esos conocimientos estadísticos se basan en el hecho de que los gemelos idénticos comparten el cien por cien de su composición genética, mientras que los gemelos fraternos comparten aproximadamente la mitad.
   "Al comparar los resultados entre gemelos idénticos y fraternales, podemos desarrollar las estimaciones de la cantidad de la diferencia en los rasgos particulares que se debe a los genes o el medio ambiente", explicó Munn-Chernoff. "Hemos encontrado que algunos de los genes que influyen en la dependencia del alcohol también lo hacen en los atracones en los hombres y las mujeres", resumió.
   Incluso con la creciente toma de conciencia y los diagnósticos más frecuentes de problemas como la anorexia y la bulimia nerviosa, los índices de las formas en toda regla de estos trastornos son relativamente bajos y son raros en las poblaciones de gemelos. Así que los investigadores encuestaron a los sujetos del análisis sobre si sufrían de síntomas de trastornos alimentarios.
   En total, casi el 25 por ciento de los hombres y el 6 por ciento de las mujeres había sido dependientes del alcohol en algún momento, además de que casi el 11 por ciento de estos mismos hombres y el 13 por ciento de las mujeres había experimentado problemas con los atracones de comida. Además, alrededor del 14 por ciento de las mujeres había participado en la purga o el abuso de laxantes o diuréticos.
   En una escala estadística que va desde cero (sin genes compartidos) a 1 (todos los genes compartidos), los investigadores encontraron que la correlación genética entre la ingesta y la dependencia del alcohol fue estadísticamente significativa de 0,26.

Fuente: Europaress.es/Salud, 23 de agosto 2013

jueves, 22 de agosto de 2013

DIETAS ALTAS EN GRASAS Y AZÚCARES EN EL EMBARAZO PUEDEN PROVOCAR VULNERABILIDAD A ABUSO DE ALCOHOL Y DROGAS EN LOS HIJOS

"La vulnerabilidad al abuso de alcohol y las drogas puede comenzar en el útero y estar vinculada a la cantidad de alimentos grasos y azucarados que la madre ingirió durante el embarazo, según los resultados de experimentos de laboratorio de animales presentados en 121a Convención Anual de la Asociación Americana de Psicología (APA), que se celebra en Honolulu, Hawai (Estados Unidos)"



   "La mayoría de las mujeres a la edad de procrear en Estados Unidos tienen sobrepeso y esto es muy probablemente debido a que comen en exceso alimentos sabrosos, ricos en grasa, con alto contenido de azúcar. El aumento de la obesidad prenatal y en la infancia y el aumento del número de jóvenes que abusan del alcohol y las drogas son problemas que pueden convertirse en cada vez mayores", dijo Nicole Avena, neurocientífico de investigación en el Instituto del Cerebro McKnight de la Universidad de Florida (Estados Unidos).
   En comparación con las crías de las ratas que comían la alimentación habitual de los roedores, las crías de ratas que se alimentaron con dietas ricas en grasa o alto contenido de azúcar durante el embarazo pesaron más que los adultos y bebieron más alcohol, y las de las dietas altas en azúcar también tuvieron respuestas más enérgicas para abusar comúnmente de drogas como la anfetamina, destacó Avena, cuyo trabajo examinó experimentos de tres estudios, con una duración cada uno de tres meses y la participación de entre tres y cuatro ratas hembras adultas y entre diez a 12 crías en cada modelo dietético.
   Los investigadores compararon el peso y el comportamiento sobre el consumo de drogas entre las crías de ratas alimentadas con dietas ricas en grasas, sacarosa, que se produce de forma natural y se procesa comúnmente a partir de la caña de azúcar o remolacha en azúcar de mesa, o jarabe de maíz con alta cantidad de fructosa, que se sintetiza a partir del maíz, con la descendencia de ratas que tuvieron una alimentación normal de roedores durante la gestación o la lactancia.
Para determinar los efectos de las dietas de las madres durante la gestación, las crías de ratas alimentadas con dietas ricas en grasas, altas en sacarosa o fructosa de jarabe de maíz fueron amamantadas por ratas madres que tomaban comida normal. Para hallar los efectos de las dietas de las madres de las crías durante la lactancia, las crías de madres que habían tomado comida normal fueron amamantadas por madres ratas que comían alimentos altos en alta sacarosa, en grasa o jarabe de maíz de alta fructosa.
   La dieta alta en grasa contenía un 50 por ciento de grasa, 25 por ciento de hidratos de carbono y 25 por ciento de proteína, mientras que la dieta de control refleja una dieta recomendada en humanos, con 25 por ciento de grasa, 50 por ciento de hidratos de carbono y 25 por ciento de proteína, según Avena.
La descendencia de las ratas que tenían dietas altas en grasa durante el embarazo bebió significativamente más alcohol en la edad adulta que las crías de ratas con la dieta normal, mientras que no hubo diferencias en la cantidad media diaria de agua que bebieron o la comida que tomaron.
Las crías de las ratas en la dieta alta en grasas durante el embarazo también tenían niveles significativamente más altos de triglicéridos, un tipo de grasa que se encuentra en el torrente sanguíneo que puede aumentar el riesgo de enfermedades del corazón. Los cachorros de ratas alimentadas con dietas con alto contenido en jarabe de maíz de alta fructosa o sacarosa no mostraron diferencias en los triglicéridos en comparación con el grupo de comida regular.
   Para comprobar los efectos de las dietas ricas en sacarosa y el jarabe de maíz alto en fructosa, los expertos dieron a un grupo de las ratas embarazadas una dieta diaria de comida regular más una solución de sacarosa al 10 por ciento o una solución de jarabe de maíz de alta fructosa del 16 por ciento. Los recién nacidos amamantados por las ratas, ya sea de dietas con alta sacarosa o jarabe de maíz de alta fructosa durante el embarazo, bebían más alcohol en comparación con las crías del grupo que no tomó azúcar.
Además, los cachorros expuestos a cualquiera de las dietas ricas en azúcar antes del nacimiento o durante la lactancia se convirtieron en hiperactivos cuando se administraron dosis bajas de anfetamina, lo que sugiere la sensibilidad a la droga. Estos animales también pesaron significativamente más al final del estudio que los nacidos a las ratas que ingirieron comida regular.
   Investigaciones previas con animales de laboratorio y personas han demostrado que comer en exceso alimentos de buen sabor altera sistemas cerebrales de recompensa, y las dietas con exceso de grasa y azúcar pueden causar un aumento del apetito, así como algunos comportamientos como la adicción, según el principal científico de este trabajo.
"Nuestros hallazgos sugieren que incluso cuando las ratas están todavía en el útero, la exposición a dietas altas en grasas y ricas en azúcar puede, además de aumentar el peso corporal, conducir a una predisposición a beber alcohol y una sensibilidad a las drogas", concluyó.

Fuente:Europapress.es/salud, 4 de agosto de 2013

lunes, 12 de agosto de 2013

"EL CAMBIO CLIMÁTICO NOS VUELVE VIOLENTOS" Según concluye un estudio estadounidense de la Universidad de California y la Universidad de Princeton



Los cambios en el clima están ligados a un aumento de los conflictos sociales y la violencia en todo el mundo...


Los cambios en el clima están ligados a un aumento de los conflictos sociales y la violencia en todo el mundo, según concluye un estudio estadounidense de la Universidad de California y la Universidad de Princeton que publica la revista Science y que está basado en datos procedentes de los seis continentes y recabados a lo largo de los últimos 12.000 años. El trabajo muestra que el clima terrestre afecta a las relaciones humanas más de lo que se pensaba. En concreto, los autores detectaron un incremento en los ataques domésticos en las últimas sequías de India y Australia, así como un aumento de los crímenes y las violaciones durante la ola de calor que azotó a EE.UU el año pasado.

Los investigadores también identificaron una relación entre el incremento de las temperaturas y los choques étnicos en Europa y las guerras civiles en África. En general, el aumento de la temperatura siempre aparecía relacionado con un aumento de la violencia personal (un 4%) y de los conflictos entre grupos (un 14%). 

Aunque aún queda por determinar las causas de esta relación, las primeras hipótesis apuntan al aumento de la presión sobre los recursos y a una respuesta biológica agresiva frente al calor. Los científicos advierten que los cambios futuros en el clima afectarán negativamente a las sociedades humanas, y que si como están previsto la temperatura global asciende 2 grados esto podría generar un aumento considerable de las guerras civiles en el mundo.

Fuente: Muyinteresante.es/artículo by E.Sanz

jueves, 8 de agosto de 2013

CÓMO ATENDER EL DUELO CAUSADO POR UNA MUERTE TRAUMÁTICA


¿CÓMO PODEMOS AYUDAR A UNA PERSONA EN DUELO?



Este tipo de pérdidas tiene un componente traumático que alcanza no sólo a los familiares de las víctimas, sino también a todas las personas que son testigos de la catástrofe a través de los medios de comunicación. De hecho, cuando tiene lugar una tragedia como la de Galicia es importante evitar la difusión de imágenes para proteger a la población frente a un posible estrés postraumático colectivo.
Las muertes súbitas son más difíciles de elaborar que otras en las que hay aviso previo de inminencia de muerte (enfermedad grave, salud deteriorada, etc.). Esta dificultad tiene que ver con que el doliente no tiene posibilidad de prepararse mental ni emocionalmente ante la pérdida.

Atender los síntomas de estrés postraumático
Una de las características que va a tener este duelo -junto con el dolor añadido de la muerte- es la posibilidad de desarrollar un estrés postraumático completo o alguno de sus síntomas (reexperimentación del accidente, insomnio, embotamiento emocional, sensación de desapego de la realidad, irritabilidad, hipervigilancia). Para ayudar a la persona afectada, habrá que estar pendiente de la aparición de estos síntomas, al tiempo que se atienden sus necesidades en el duelo inmediato.
A esto también puede unirse la sensación de falta de realidad de la muerte por parte del doliente. Por tanto, la ayuda psicológica principal irá encaminada a ayudarle a elaborar la realidad de la pérdida, que es la primera tarea del duelo. Para ello será especialmente importante rememorar junto a él cómo recibió la noticia, cómo reaccionó él y su entorno, o cómo fueron los ritos de despedida (funeral, entierro).
En las horas inmediatamente posteriores a la catástrofe, los profesionales sanitarios pueden prestar ayuda a los familiares con su acompañamiento y escucha, mostrando interés y cuidado, y atendiendo tanto su dolor como el posible  bloqueo que surja en los primeros momentos.
Sensaciones habituales tras una pérdida traumática
Otras sensaciones también frecuentes entre las personas que han perdido al alguien de manera traumática son los sentimientos de culpabilidad. Es habitual que el doliente fantasee con finales diferentes, con distintos “Y si” (“Y si hubiera venido al día siguiente”, “Y si no hubiera cogido el tren”, etc.), manteniendo vivo al fallecido en su pensamiento y, por tanto, bloqueando la primera tarea.
Para desbloquearla, es útil que el doliente vuelva a la realidad de lo ocurrido ycontextualice el momento de la muerte, es decir, que no se ciña solo a cómo fue ésta, sino también a qué ocurrió días antes, cómo estaba el fallecido, cómo eran sus vidas… de modo que pueda aceptar que los accidentes pasan, que no dependía de él lo que ocurrió. La elaboración de este tipo de pérdida va a tener mucho que ver con aceptar que las cosas ocurren, que no están bajo nuestro control y que en los accidentes casi siempre intervienen multitud de factores.
Cómo podemos ayudar a una persona en duelo
- La primera de las ayudas básicas que podemos proporcionar a alguien que está en duelo es ofrecerle nuestro interés y nuestra apertura a la comunicación; mostrarnos interesados y abiertos a lo que la persona quiere compartir. Es importante ser conscientes de que nada de lo que podamos decir va a aliviar instantáneamente el dolor de la persona.
El duelo duele y que exista dolor es parte inherente del proceso. Escuchar realmente a alguien que está sufriendo, estar a su lado de forma auténtica, con cariño y cuidado es una ayuda fundamental y de gran valor. Si no se sabe qué decir, es mejor no decir nada. Reconforta más un acompañamiento en silencio o una mano en el hombro que una frase hecha. Se suele menospreciar el poder de la escucha y del acompañamiento, como si no fuera suficiente. Sin embargo, estar al lado de alguien que sufre, validar con nuestra atención todo aquello que está viviendo, le ayudará a andar el camino del duelo. Permitir al doliente poner palabras al dolor, expresarse con el llanto o el enfado, o compartir cómo está afrontando su pérdida le va a ayudar a elaborar las tareas del duelo de una manera casi espontánea.
- Resulta también un gran apoyo ofrecer ayudas más específicas: concretar el 'Llámame cuando quieras' o 'Estoy aquí para lo que necesites'. En su lugar, podemos ofrecernos para ayudarle en tareas cotidianas que, tras la pérdida, puedan resultar más complicadas de abarcar (ir al banco, gestiones administrativas), así como tomar la iniciativa para llamar al doliente y quedar con él.
Dejarse guiar por el respeto a la vivencia del otro (cada duelo es único y su duración varía según la persona) y estar junto al doliente desde la autenticidad son dos factores clave en la ayuda en el duelo.
Fuente: ELMundo.es/salud /neurociencia, 30 de julio 2013